Recomendaciones para evitar accidentes con puertas y ventanas

Nuestra casa es probablemente el lugar donde nos sentimos más seguros y tranquilos. Pero incluso estando en ella el riesgo de accidente está muy presente. Especialmente para los niños y ancianos, porque son dos colectivos más vulnerables a cualquier tipo de percance en el ámbito doméstico.

De hecho, hoy en ARREGUI queremos traerte una serie de recomendaciones para evitar accidentes con puertas y ventanas. Estos dos puntos de conexión con el exterior tienen sus propios peligros, porque el sistema de apertura/cierre de ambas puede atrapar dedos, manos o incluso extremidades; mientras que, en el caso de las ventanas, todavía hay una amenaza aún mayor: la de caída a gran altura.

¡Así que te invitamos a seguir leyendo para cuidar de tu seguridad y la de tu familia!

Consejos de seguridad para puertas

Las puertas son elementos tan habituales en los edificios y hogares que casi no nos damos cuenta de que ahí están. Sin embargo, prácticamente todo el mundo ha sufrido en alguna ocasión de su vida un accidente o percance con alguna de ellas, de menor o mayor gravedad. Un simple despiste dejando un dedo o mano en el lugar inadecuado en el momento también equivocado puede acabar en un golpe o atrapamiento muy doloroso.

Lógicamente, en este caso, el primer consejo que se puede dar es el de extremar las precauciones y los cuidados cuando abramos o cerremos una puerta y, en especial, si en ese momento hay otra persona cerca, como un bebé o un anciano. Justo antes de utilizarla, debemos cerciorarnos de que nadie tiene apoyada una mano en el marco de esta, y comprobar que no hay ningún niño jugando o moviéndose cerca de ella.

Pero aquí la teoría es más sencilla que la práctica. Por eso, siempre podemos recurrir a soluciones domésticas de carácter práctico para evitar los accidentes al utilizar las puertas. De hecho, en ARREGUI contamos con hasta cinco productos distintos que, o bien evitan portazos imprevistos o bien limitan su cierre para que nadie pueda sufrir un accidente.

Tope antigolpes para puerta

Se fija a la madera de la puerta mediante 6 tornillos. Así, impide que esta se cierre de golpe, aunque cuenta con un mecanismo retráctil que sí permite cerrarla totalmente si se tira con firmeza de la manilla.

Tope de bisagras

Es especialmente útil para utilizar cuando consideremos que hay peligro de accidente por la proximidad de un menor. Basta con colgarlo de una bisagra de la puerta para que impida que esta se cierre; con la ventaja de que incorpora también un soporte para recogerlo cuando no lo estemos usando.

Protector de bisagras

Es un mecanismo que está pensado para instalarse de forma permanente, porque se coloca cubriendo las bisagras. Con él, es posible abrir y cerrar la puerta, pero evita al mismo tiempo que los niños puedan introducir los dedos y pillárselos.

Está elaborado en material transparente y flexible, tiene unas medidas de 120×7 cm y se fija mediante adhesivos 3M. Aunque también se pueden atornillar como medida extra de seguridad, especialmente si se utilizan en guarderías, ludotecas o espacios similares.

Tope de suelo

Una opción clásica, sencilla y eficaz que apenas notarás que está. Es un tope de plástico que se instala bajo la puerta para evitar que esta se mueva y se cierre. De hecho, es antideslizante para fijarse bien al suelo. Y además, tiene un diseño muy práctico que permite colocarlo en el pomo de la puerta si no se usa, ya que incorpora colgador. ¡Todo ello en ocho colores diferentes, para que encaje a la perfección con el entorno!

Salvadedos

Tal y como su nombre indica, impide que uno o varios dedos queden atrapados en el canto de la puerta. Para ello, se fija bajo presión en esta e impide que la puerta se cierre por completo. Sus medidas son 12×9 cm y se presenta en una unidad o blíster.

Consejos de seguridad para ventanas

Como ya adelantamos al principio, al riesgo de pillarse los dedos con la ventana, hay que sumar también el de caída involuntaria a gran altura. No en vano, según datos de Instituto Nacional de Estadística (INE), anualmente fallecen en España entre 10 y 15 menores de edad por caídas desde gran altura y más de 4.000 requieren de asistencia sanitaria.

Por lo tanto, la seguridad en esta parte de las casas es, si cabe, todavía más importante. Los niños (principalmente los de corta edad) no tienen conciencia de los riesgos que hay a su alrededor y apenas tienen un adecuado domino y coordinación de su cuerpo. Por lo que es necesario impedir que puedan acceder fácilmente hasta una ventana y, sobre todo, que puedan abrirla o cerrarla a su antojo.

¿Y cómo hacerlo? A continuación te dejamos varios consejos de seguridad.

No incitar al niño a que se acerque a la ventana

La educación es un aspecto importante. Si el crío está en edad de razonar y de entender lo que le decimos, podemos explicarle que las ventanas son un lugar peligroso y que no debe acercarse a ellas. Y si es lo suficientemente pequeño para comprenderlo, también podemos evitar atraerle hasta ellas para que no tenga ninguna razón para interesarse. Por ejemplo, no es recomendable llevarle habitualmente a ver el paisaje, porque quizá esto le anime a intentar acercarse a la ventana cuando no haya ningún adulto a su lado.

Impedir el fácil acceso hasta las ventanas

Normalmente, las ventanas están a una altura prudencial del suelo y un niño de corta edad no podrá acceder fácilmente hasta ella para abrirla. Pero cualquier elemento del mobiliario que esté cerca puede permitirle escalar y alcanzarla, por lo que la disposición de los objetos de nuestra casa también cuenta, y mucho.

Extremar la atención

Por supuesto, vigilar al pequeño es otro aspecto fundamental, especialmente si este ya tiene cierta autonomía y gatea o anda por sí solo. 30 segundos de despiste pueden ser fatales, así que hay que estar siempre muy pendientes de los niños, sobre todo si estos tienen cierta libertad para moverse y hay peligros a su alrededor.

Utilización de rejas o persianas

Estos sistemas de seguridad son muy útiles para evitar robos, pero también dificultan mucho que alguien pueda caerse por la ventana. Aunque eso sí, a la hora de elegir rejas para instalarlas, tenemos que asegurarnos de que sean desmontables desde el interior, ya que en caso de necesidad de evacuación, se podrán quitar rápidamente.

Junto a las rejas, también puedes recurrir a las persianas como medida de seguridad. Lo malo es que para que sean totalmente útiles, siempre deberás tenerlas bajadas, lo que impedirá que entre luz y que tengas visibilidad del exterior.

Los cristales, a ser posible de seguridad

No solo las caídas están detrás de los accidentes con las ventanas. También pueden producirse percances por la rotura del vidrio, por un golpe involuntario, un uso inadecuado o una elección inapropiada del material.

Tratándose de ventanas, no es recomendable instalar vidrio común, porque no es muy resistente y al romperse se astilla en varios trozos muy afilados. En su lugar, podemos optar por un vidrio templado, más duro y que al romperse se divide en trozos pequeños y sin aristas afiladas; o vidrio laminado, compuesto por varias hojas unidas por una lámina de plástico, la cual evita que algún trozo se desprenda si se produce una rotura.

Utilización de mallas de seguridad

Si necesariamente la ventana debe quedarse abierta (por tener que ventilar o encontrarnos en los meses de verano), podemos instalar una malla de seguridad. Esta es una red que normalmente se fabrica a medida y que se coloca en la ventana (también en balcones, terrazas, etc.) para evitar caídas. Con la ventaja de que no limita ni la visibilidad ni la entrada de luz o aire.

Instalar productos de seguridad específicos para ventanas

Al igual que ocurre con las soluciones para la seguridad de puertas, podemos recurrir a productos de ARREGUI para proteger nuestras ventanas:

• Limitador de apertura de ventana: se emplea en ventanas de bisagra, batientes, correderas o de guillotina. Permite una apertura máxima de 10 centímetros e incluye 4 tornillos para su fijación en madera.
• Limitador metálico de apertura de ventanas correderas: se fija alineado en la guía del canal superior e inferior de la ventana, ya que cuenta con un tornillo en el limitador. Permite una fuerte fijación en ventanas correderas que tengan un grosor máximo de las guías de 9 mm e incluye llave Allen.
• Limitador de apertura de ventanas correderas por ventosa: Su sistema crea un vacío sobre la superficie del vidrio de la ventana corredera para evitar que esta pueda abrirse. Se fija en el marco mediante adhesivo 3M y sus medidas son 10×5 cm.
• Recogedor de cuerda para cortinas y estores: las cuerdas de las cortinas y persianas también pueden suponer un peligro. De ahí estos recogedores que permiten enrollar en su interior las cuerdas hasta dejarlas en la medida deseada, impidiendo que los niños puedan tirar de ellas o manipularlas.

Evita accidentes con puertas y ventanas con ARREGUI

Hasta aquí nuestros consejos domésticos para que puedas prevenir cualquier percance en tu hogar relacionado con las puertas o ventanas. Esperamos que te hayan sido útiles y no olvides ponerte en contacto con nosotros si tienes cualquier duda o cuestión relacionada con los productos de seguridad que te ofrecemos.

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