Las caídas son un peligro que no debemos minusvalorar. Según datos de la Organización Mundial de Salud (OMS), estas están detrás de 684.000 muertes anuales en todo el mundo, por lo que son la segunda causa de fallecimiento por traumatismos involuntarios. Y sus daños no se quedan ahí, ya que también pueden provocar lesiones de diversa gravedad e incluso incapacidad, toda vez que cada año se producen más de 37 millones de caídas graves.

Como ya hemos indicado en más de una ocasión, la prevención es un magnífico mecanismo para evitar accidentes en el ámbito doméstico. Poner en práctica estrategias para evitar situaciones que favorezcan las caídas es fundamental para no pasar a engrosar estas estadísticas, de manera que en nuestro blog hemos querido recopilar algunas recomendaciones que nos permitan evitar tanto las caídas como los resbalones en casa.

¿Qué personas son más susceptibles de sufrir una caída en casa?

Podemos destacar cinco factores que influyen en el riesgo de sufrir un accidente de este tipo.

La edad

Los mayores de 60 años están más expuestos a una caída o resbalón. Y, a mayor edad, también más riesgo de sufrir algún tipo de lesión o incluso de fallecer. Por ejemplo, en los Estados Unidos entre un 20 % y un 30 % de los ancianos que sufren un episodio de este tipo padecen lesiones moderadas a graves, como pueden ser contusiones, fracturas (especialmente de cadera) o traumatismos craneoencefálicos.

Los mayores suelen presentar trastornos de carácter físico, sensitivo o cognitivo que los exponen a este tipo de accidentes. E igualmente son más susceptibles de que el traumatismo tenga consecuencias negativas para su integridad física.

Y, junto a este grupo de edad, los niños también tienen más probabilidades de sufrir una caída, por su inexperiencia, su curiosidad innata por el entorno y su dinamismo.

El sexo

A nivel estadístico, los varones presentan tasas más altas de lesiones graves y mortalidad por caídas. Esto podría explicarse tanto por su tendencia a adoptar comportamientos de mayor riesgo —en comparación con las mujeres— como a que en ocasiones asumen trabajos que comportan cierto peligro.

Más allá de esta circunstancia, las mujeres de elevada edad y los niños son especialmente propensos a sufrir una caída y a que esta revista cierta gravedad.

Estado de salud

La existencia de enfermedades subyacentes, como trastornos neurológicos, afecciones incapacitantes o cardiopatías puede incrementar el riesgo de padecer una caída. Así como también los problemas cognitivos, visuales y de movilidad; especialmente si estos afectan a ancianos o pacientes crónicos.

Comportamientos de riesgo

El consumo de alcohol y de otras sustancias, los efectos secundarios de los medicamentos, la inactividad física o la ausencia de seguridad del entorno también puede estar detrás de estos accidentes.

Factores ambientales

La existencia de suelos mojados o resbaladizos, la ausencia de una correcta iluminación, las superficies en mal estado o la presencia de obstáculos son factores que pueden propiciar las caídas. Especialmente en el caso de los grupos de riesgo, como los ancianos.

Consejos para prevenir las caídas en el hogar

Mantener el suelo en buenas condiciones

Si nos movemos por superficies sólidas, secas y lisas será más difícil que resbalemos o caigamos. Es importante mantener el suelo en unas condiciones óptimas, por lo que si en lugares como la cocina o el comedor caen restos de comida o algo de líquido tendremos que limpiarlos inmediatamente para que ese punto de nuestro hogar no resulte resbaladizo.

Atención constante

En el momento de entrar en una habitación o de movernos por un nuevo espacio, como un pasillo, podemos hacer un sencillo ejercicio. Consiste en visualizar rápidamente todo, para confirmar que el camino está totalmente despejado y libre de riesgos. Y si no es así, tendremos que quitar y recoger aquellos elementos que nos lo puedan dificultar —como ropa, juguetes o zapatos— o adecuar las zonas peligrosas —como una alfombra arrugada—.

Mantener el suelo libre de obstáculos

Como ya hemos anticipado en el anterior punto, la presencia de objetos en el camino incrementa mucho el riesgo de sufrir un accidente de este tipo. No ver a tiempo un obstáculo que está en medio o confiarse en una habitación desordenada puede hacer que tropecemos y caigamos. Por lo que una casa bien organizada y sin trastos será también un espacio más seguro.

Evitar las prisas

Ir corriendo de un lado para otro tampoco ayuda para evitar resbalones y caídas en casa. Tener prisa puede hacer que nos movamos rápido, de forma que será más fácil que bajemos la guardia o que perdamos el equilibrio. Así que, cuanto más pequeño o estrecho sea el espacio por el que nos estemos moviendo, más tranquilos deberemos estar.

Estancias bien iluminadas

La ausencia de luz es otro factor clave en este tipo de incidentes. Levantarnos por la noche para ir al baño y no encender la luz es un error típico que puede acabar siendo fatal, porque aunque conozcamos bien nuestra casa, siempre podemos tener algún despiste o toparnos con algo que no esperábamos. Con lo cual, lo recomendable es que, siempre que necesitemos desplazarnos, iluminemos totalmente la zona en la que estamos para evitar caídas y resbalones en casa.

Elegir alfombras seguras y antideslizantes

Las alfombras tienen muchas ventajas para nuestro hogar, porque además de adornar y proteger el suelo también aportan calidez, delimitan los espacios o amortiguan los ruidos. E incluso también pueden resultar especialmente idóneas para evitar los resbalones y caídas en casa. Aunque, para que hagan correctamente esta función, es básico que elijamos alfombras seguras y que tengan propiedades antideslizantes.

Especialmente si se trata de alfombrillas de baño, porque su función principal es ayudar a que la superficie de la bañera o del plato de ducha no se convierta en un peligro en sí misma cuando esté mojada.

Uso de un calzado adecuado

Es normal que en casa queramos sentirnos lo más cómodos posibles, pero esto no significa que podamos descuidar nuestros pies. Movernos descalzos por las habitaciones, no ponernos el calzado adecuadamente, usar chanclas o utilizar unas zapatillas desgastadas son situaciones que pueden incrementar el riesgo de caída, porque tendremos más probabilidades de tropezar que si protegemos nuestros pies con, por ejemplo, unas zapatillas cerradas con una suela que agarre bien y no resulte pesada.

Instalación de pasamanos y barras de agarre

Tanto si tu casa tiene una zona especialmente peligrosa —como unas escaleras— como si en ella viven personas de riesgo —como ancianos—, la instalación de pasamanos o barras de agarre puede ser una magnífica idea. Estos elementos son especialmente útiles en los cuartos de baño, donde la movilidad es siempre más reducida y hay que realizar movimientos complejos, como para entrar y salir del baño o la ducha.

Adaptación del entorno

Y si un pasamanos o barra de agarre no resulta suficiente para garantizar la seguridad de las personas que habitan el hogar, siempre podremos realizar las obras necesarias para adaptar el entorno. Remodelaciones típicas son el cambio de bañera por un plato de ducha antideslizante, la instalación de asientos de ducha especiales, la utilización de grifos termostáticos para que no se produzcan cambios de temperatura bruscos, etc.

Evitar o controlar el acceso a zonas peligrosas de ancianos y niños

Hay algunas partes o estancias de la casa que inevitablemente pueden resultar peligrosas para las personas mayores o los niños. Nos referimos, por ejemplo, a las escaleras. Así que deberemos prestar especial atención si estas personas se acercan a zonas de peligro e incluso tendremos la opción de evitar que accedan a ellas.

En ARREGUI proponemos la utilización de nuestra valla extensible de madera para controlar el acceso a escaleras, ya que es una solución estupenda para impedir que los niños de corta edad se puedan acercar y caer. De hecho, puede utilizarse también para evitar el acceso a habitaciones, porque se puede instalar en el marco de una puerta.

Resulta muy fácil de instalar e incluye elementos de fijación e instrucciones de montaje. Así, al ser extensible (su anchura va de 63,5 a 103,5 cm) se adapta a multitud de necesidades a la vez que cumple con la Norma EN 1930.2011.

Utilización de soluciones antideslizantes específicas

Y, no menos importante, también podemos evitar resbalones y caídas en casa con la ayuda de soluciones antideslizantes. En ARREGUI contamos con una amplia gama de estos productos.

Spray antideslizante + gel limpiador

Solución antideslizante que se utiliza en superficies cerámicas y sanitarias. Primero se aplica el gel limpiador antical y antigrasa y después el barniz translúcido con propiedades antideslizantes.

Spray antideslizante para exterior

Es ideal para zonas de exterior, como terrazas, escaleras, bordes de piscina y suelos de ducha. Resiste la radiación ultravioleta y es multi superficie. Presenta un acabado ligeramente rugoso y ofrece tanto un secado rápido como una gran adherencia.

Cinta antideslizante tacto suave

Puedes usarla tanto en exterior como en interior para obtener un alto nivel de agarre. Se instala fácilmente, se adhiere perfectamente a múltiples superficies, es resistente al agua y no abrasiva.

Cinta antideslizante transparente

Es la solución que necesitas si quieres conseguir seguridad en zonas que, por sus características, pueden causar resbalones o caídas, como bañeras y suelos de ducha. Por ello, es especialmente resistente a la humedad.

Cinta antideslizante de color negro

Opción disponible en varias medidas que se puede utilizar tanto en exterior como en interior. Aporta seguridad en aquellas zonas que pueden ser peligrosas y provocar resbalones o caídas.

Cinta antideslizante de color amarillo y negro

Ofrece las mismas prestaciones que la cinta antideslizante de color negro, pero su diseño resulta más llamativo y alerta del ‘peligro’ de la zona.

Cinta luminiscente

La elección perfecta si lo que quieres, además de ganar en seguridad frente a resbalones y caídas, es señalar y alertar sobre zonas peligrosas del hogar. En concreto, gracias a sus propiedades luminiscentes brilla en la oscuridad, así que puede indicar la presencia de escalones, puertas, pasamanos, etc.

Antideslizante de baño

La opción con ventosa se fija fácilmente en la superficie de la bañera para evitar accidentes con niños, mientras que la opción antideslizante con adhesivo se coloca de forma permanente.

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Arregui, Seguridad