Arregui, Seguridad
Consejos para tener un cuarto de baño totalmente seguro
El cuarto de baño es un lugar que cumple una función vital para todo hogar y que, al mismo tiempo, nos invita a tomar especiales medidas de seguridad cada vez que nos encontramos en él. El hecho de utilizarlo todos los días o de desplazarnos descalzos por superficies húmedas – como la bañera – incrementa el riesgo de que suframos un accidente, de manera que es recomendable que prestemos atención a todos nuestros movimientos y que incluso recurramos a soluciones específicas para prevenir situaciones de riesgo.
Esta semana vamos a ofrecerte una serie de consejos para que puedas disfrutar de un cuarto de baño seguro en tu hogar. Y también vamos a hablarte de nuestra gama de productos para ayudarte a conseguirlo, la cual incluye antideslizantes, un protector para grifo y un adaptador de WC para los más pequeños.
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Consejos para conseguir un cuarto de baño que sea totalmente seguro
Instalar suelos antideslizantes
Aproximadamente 2 de cada 3 caídas de personas de la tercera edad en el hogar transcurren en el cuarto de baño, según un estudio realizado por la Federación de Radios Locales de Cataluña en colaboración con Mundoabuelo. Sin embargo, este es un problema que no solo afecta a nuestros mayores, sino que supone un riesgo para personas de todas las edades.
El suelo mojado o la humedad son factores que incrementan la probabilidad de sufrir un resbalón y caída, sobre todo si el pavimento es liso y escurridizo. Así que para evitar estas situaciones tenemos varias opciones: sustituir el suelo por un material antideslizante, colocar alfombras que contribuyan a dar mayor agarre y absorber la humedad, y poner especial cuidado para evitar que caiga agua al suelo o queden zonas mojadas.
Colocar barras o asideros junto a la bañera y el WC
Si el diseño y la distribución del baño lo permiten, es aconsejable instalar barras o asideros que permitan agarrarse a ellos para entrar o salir de la bañera, ya que ofrecen estabilidad tanto en la ducha como en el WC. En este caso, contar con un punto de apoyo puede marcar la diferencia entre sufrir una caída y utilizar el baño con total tranquilidad.
Ventilar el baño de forma habitual, especialmente tras la ducha o baño
El baño es una de las habitaciones que menos acostumbramos a ventilar, ya que pasamos poco tiempo en él comparado con el resto de los espacios de la casa. Sin embargo, es fundamental que lo ventilemos de forma regular, porque además de ayudar a evitar la proliferación de bacterias y microorganismos, nos ayudará a reducir la humedad que suele acumularse.
Un gesto tan simple como abrir la ventana durante 5 minutos tras ducharnos o bañarnos contribuirá a rebajar la humedad ambiental, ya que evaporará las gotas de agua que puedan haber quedado e impedirá que se genere moho en algunos lugares. Y si no disponemos de una ventana, quizá podamos plantearnos incorporar una instalación de aireación que utilice rejillas o sistemas de extracción.
Especial atención a la electricidad
Como bien sabemos, el agua y la electricidad no se llevan nada bien. Por lo que hay que evitar que estas dos convivan en un espacio de reducidas dimensiones, como suele ser el caso de los baños. En ellos podemos guardar los aparatos y electrodomésticos imprescindibles, como secadores y alisadores de pelo o afeitadoras; y utilizarlos siempre con total precaución. Lo que, por supuesto, incluye no encenderlos mientras estamos en contacto con el agua, ni acercarlos a la ducha o bañera mientras las empleamos al mismo tiempo.
Además, también es recomendable localizar los enchufes lo más alejados posibles del origen del agua, para que esta no llegue hasta ellos. Y emplear protectores específicos para ellos que contribuyan a aislarlos del entorno.
Medicamentos y sustancias tóxicas, fuera del alcance de los niños
El cuarto de baño es también un lugar donde habitualmente podemos almacenar medicamentos, el botiquín e incluso productos de limpieza como lejía. Y dado que es una zona de la casa por la que inevitablemente pasarán constantemente los más pequeños, es importante que designemos un espacio para guardarlos que esté fuera de su alcance. Un armario a una altura prudencial o una estantería elevada pueden ser unas buenas opciones para que esta costumbre no se convierta en un problema.
Aquí nuestra recomendación directa es la instalación en los armarios de nuestros cierres específicos —entre los que puedes encontrar soluciones regulables, multiusos o de horquilla— o de nuestras protecciones para cajones, con topes y cierres que evitarán tanto accidentes y lesiones como el acceso al contenido de los mismos.
Correcta distribución del mobiliario
Ya hemos hablado de que detrás de la mayoría de las caídas que tienen lugar en el baño están las superficies resbaladizas o la humedad. Pero también puede producirse un percance de este tipo por una mala ubicación de un mueble u objeto, como un taburete. En consecuencia, la distribución de los objetos según el espacio disponible es de gran importancia; ya que hay que colocarlos donde no dificulten el paso ni estorben. E intentar que estos no sean particularmente duros ni presenten picos o zonas cortantes, porque un golpe contra ellos podría ser muy dañino.
Los productos de ARREGUI para incrementar la seguridad de tu cuarto de baño
En ARREGUI contamos con nuestra propia gama de productos de protección para baño. Son los siguientes:
- Antideslizantes: mediante ventosa, adhesivo o cinta transparente, la mejor protección para evitar que los niños sufran algún resbalón o caída durante el baño. O, si prefieres no incorporar ningún elemento a la estancia, a la bañera o ducha, también puedes optar por nuestra solución antideslizante para superficies cerámicas y sanitarias. Consta de un gel limpiador —antical y antigrasa— y de un spray con barniz translúcido para conferir a la superficie las propiedades antideslizantes.
- Protector grifo de bañera: divertido protector de silicona con la forma de una cabeza de elefante. Está preparado para evitar que los más pequeños de la casa se golpeen con el grifo mientras se bañan.
- Taburete plegable multiuso: Una opción ideal para que los niños se sienten o lleguen a zonas de difícil acceso para ellos, como el lavabo. Es plegable, por lo que se recoge fácilmente y apenas ocupa espacio, además de antideslizante y fácilmente transportable mediante su asa.
- Adaptador para WC: Asiento reductor para el váter, de forma que los niños puedan utilizarlo sin problemas. Es plegable y antideslizante.
¿Qué te parecen? ¡Hazte ya con los productos que necesitas y convierte tu baño en un lugar seguro y a prueba de resbalones, golpes y todo tipo de accidentes!
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