Arregui, Seguridad
Consejos para prevenir incendios en el hogar
El fuego es un peligro que nunca debemos minusvalorar, incluso aunque nos encontremos en nuestro hogar. En nuestro día a día lo usamos para cocinar, y además también utilizamos un buen número de electrodomésticos que requieren de energía para funcionar, por lo que el riesgo de sufrir algún accidente siempre está presente.
De hecho, según el ‘Estudio de Víctimas de Incendios y Explosiones en España’, las últimas cifras sobre incendios en nuestro país son preocupantes. En 2021 hubo 127.600 fuegos o explosiones en todo el territorio nacional, de los cuales 17.400 fuegos correspondieron a incendios en viviendas. Pues bien, todos estos siniestros propiciaron la muerte de 204 personas, el segundo peor registro desde que se toman datos, tan solo superado por 2017 (212 fallecidos).
Probablemente no pocos de estos incidentes se podrían haber evitado teniendo en cuenta una serie de consejos para prevenir los incendios, especialmente en el hogar. Por lo que hoy te acercamos varias recomendaciones para tener siempre presentes.
Recomendaciones generales para evitar incendios en casa
Revisar la instalación eléctrica
Tal y como aconsejan los Organismos de Control Autorizados (OCA), debemos revisar de forma profesional la instalación eléctrica de nuestro hogar al menos una vez cada 10 años. Mientras que, en el caso de los locales de negocios medianos y grandes, esta revisión deberá hacerse en intervalos de 5 años.
Detectores de humo
La instalación de estos sistemas inteligentes para detectar la presencia de humo y gas nos aportará un plus de tranquilidad. Lo idóneo es colocarlos en puntos estratégicos, como cocinas o habitaciones, para que nos avisen con señales acústicas y/o visuales en el caso de que detecten indicios de que está comenzando un incendio.
Evitar las velas encendidas o las lámparas de aceite
Gracias a la electricidad ya están prácticamente en desuso, aunque se pueden utilizar en caso de apagón. Si es así, es importante tenerlas siempre vigiladas y evitar colocarlas cerca de elementos inflamables.
Hay que confirmar que apagamos todo antes de salir de la habitación
Por supuesto, siempre que cocinemos con fuego o gas debemos estar muy pendientes. Y cuando terminemos, asegurarnos de que apagamos todo; al igual que deberemos hacer si tenemos una chimenea y vamos a dejar de estar en esa habitación.
No dejar productos inflamables cerca de los niños
Cerillas, mecheros, sartenes en el fuego, etc. son elementos que pueden llamar la atención de los niños, especialmente si estos son de corta edad. Así que es fundamental que los mantengamos alejados de ellos y que extrememos la vigilancia si hay pequeños en el hogar.
No fumar mientras estamos en la cama o en el sofá
Fumar y acomodarse en la cama o sofá tiene unos enormes riesgos. No pocos incendios se inician de esta manera, como por ejemplo, por la caída de la colilla encendida sobre el colchón o el tapizado, lo que puede tener consecuencias funestas para el fumador. Por lo tanto, es aconsejable fumar lejos de objetos inflamables y en situaciones donde no podamos quedarnos dormidos.
Si tienes mascota en casa, préstale especial atención
Al igual que sucede con los niños pequeños, ojo con los animales que estén por casa. Evitemos que se mueven y jueguen cerca de zonas peligrosas y de productos inflamables.
Medidas de seguridad para la cocina
Supervisar el fuego y el gas al cocinar
Ya lo hemos comentado en el anterior punto: cocinar bien implica tener los cinco sentidos en lo que estamos haciendo. Encender el fuego incrementa el riesgo de accidente, por lo que nunca debemos perderlo de vista ni alejarnos mucho durante largos períodos de tiempo.
No dejar que se acumule suciedad ni grasa
Sustancias como el aceite o la grasa son altamente inflamables, de forma que es importante que limpiemos de manera habitual nuestra cocina y, en especial, zonas como el horno, la vitrocerámica, etc. Al eliminar los restos que puedan quedar, evitaremos que actúen como catalizadores para propagar un fuego.
Si utilizamos cocina de gas, cerrar la llave de paso al salir de casa
Las fugas de gas están también detrás de algunos incendios. Así que, si no vamos a estar en casa, lo mejor es cerrar la llave. Si lo hacemos, evitaremos cualquier combustión espontánea o que todo se llene de gas (con el correspondiente peligro) mientras estamos fuera.
Ten a mano una tapa de olla o de sartén
Si ves que se inicia un fuego, podrás utilizarla rápidamente para tapar la olla o sartén, y así evitar que crezca y logre propagarse.
No utilizar el horno para calentar nuestro hogar
El horno es otro punto de riesgo por su potencia, así que hay que usarlo siempre con cuidado y solo para lo que está pensado. Para ello, nuestro cierre de seguridad para puerta de horno puede serte muy útil, porque al impedir la apertura de su puerta, está preparado para evitar fugas de gas, quemaduras y cualquier otro tipo de accidente peligroso. ¡Y además es ideal también para utilizar en otros electrodomésticos, como microondas y lavavajillas!
Especial atención a la electricidad y los electrodomésticos
No sobrecargar enchufes
Requerir más potencia de la que nos pueden dar los enchufes, alargadores, etc. puede provocar una explosión o incendio. Para evitarlo, hemos de conocer bien la potencia máxima que puede ofrecer cada uno y evitar enchufar demasiados elementos a una misma toma.
Mantener en buen estado los enchufes
Haz un seguimiento habitual de la situación en la que se encuentran los enchufes de tu hogar. Aspectos aparentemente sin importancia, como la acumulación de humedad o suciedad en ellos puede hacer que se recalienten y que originen un incendio.
En ARREGUI te ofrecemos varios productos para proteger tus enchufes y cables de la acción de los niños e impedir que se acumule la suciedad en ellos. Conócelos aquí.
No utilizar alargadores para proporcionar electricidad a electrodomésticos de alto consumo
En ocasiones, no tenemos cerca un enchufe cuando más lo necesitamos. Para eso están las regletas o alargadores. Pero es clave que estos productos sean de calidad y que nos informemos de la potencia que pueden soportar, ya que no es recomendable que utilicemos estas soluciones para conectar electrodomésticos de alto consumo, como planchas, lavadoras o secadores.
Desenchufar los electrodomésticos que no usemos
Las probabilidades de que se inicie un incendio por un electrodoméstico enchufado son bajas, salvo que haya algún elemento que esté en mal estado. Pese a ello, si no lo vamos a usar, lo aconsejable es tenerlo desenchufado. Especialmente, si vamos a irnos de viaje o a dormir.
Usar cargadores, cables y electrodomésticos de calidad
En estos casos, lo barato suele salir caro. Y es que, en asuntos de seguridad el ahorro es secundario, por mucho que tengamos la tentación de conservar algunos euros por el camino. Nuestro consejo es comprar siempre productos eléctricos seguros y de marca reconocible, porque usar soluciones de baja calidad (como cargadores, cables, etc. de marca blanca o incluso imitaciones) incrementan mucho las probabilidades de que haya un percance.
Controlar su funcionamiento y, ante la mínima señal, enviarlo a reparar o sustituirlo
¡No lo uses si ves que está en mal estado! Ante cualquier señal de que hay algo que no funciona bien o de rotura, compra uno nuevo o envíalo a su correspondiente servicio técnico.
A la hora de reparar, toma las medidas de seguridad adecuadas
Si haces algún tipo de reparación o sustitución básica, toma las medidas de seguridad adecuadas. Hasta el cambio de una bombilla requiere que asumamos ciertas precauciones.
La calefacción, otro aspecto a vigilar
Controla las estufas, braseros y calefactores portátiles
Estos productos generan altas temperaturas, por lo que su uso conlleva ciertos riesgos. No en vano, su portabilidad los hace si cabe algo más peligrosos, porque por despiste podemos dejarlos cerca de elementos inflamables, como telas, plásticos, papeles, etc. Así que siempre tenemos que colocarlos en espacios amplios y utilizarlos tomando precauciones.
Revisa convenientemente tu caldera, estufa, chimenea, etc.
Procura que la instalación cumple con todos los requisitos de seguridad y asegúrate de que se encuentra siempre en perfecto estado. Y si tienes la más mínima duda sobre su situación, ¡llama a un técnico antes de hacer uso de ella!
Si percibes olor a gas… ¡no enciendas ningún fuego ni actives ningún interruptor!
Si hay gas en el ambiente, una simple chispa puede ser suficiente para provocar una gran explosión. Por lo tanto, si olemos o percibimos su presencia en el aire, deberemos ventilar rápidamente, cerrar la llave de gas e informar a la compañía de suministros o a los bomberos.
Ten en cuenta estos consejos para prevenir incendios y disfruta de un hogar más seguro
Como acabas de ver, la lista de recomendaciones que te hemos propuesto es bastante larga. Y es que los riesgos y peligros en el ámbito doméstico no son pocos, por lo que esperamos que te sea muy útil y que te ayude a prevenir este tipo de accidentes.
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