Arregui, Buzones Individuales
Consejos para el mantenimiento y la limpieza de los buzones de correo
Los buzones de correo son soluciones que están fabricadas para perdurar y ser utilizadas durante muchos años. Sin embargo, requieren de un mantenimiento regular para ofrecer una máxima durabilidad y tener todos sus componentes en un buen estado. Es por ello por lo que hoy en ARREGUI queremos traerte una serie de consejos para su correcto mantenimiento y limpieza, los cuales te ayudarán a que siempre luzcan como el primer día.
¿A quién le corresponde mantener mi buzón de correo?
En primer lugar, conviene aclarar la responsabilidad del mantenimiento de estos elementos, porque es posible que algunas personas consideren que es una tarea que no recae en ellas. En el caso de las comunidades de vecinos, la instalación de los buzones de correos es obligatoria por ley, pero lo cierto es que la normativa no entra en muchos pormenores.
Así, se especifica que, pese a ubicarse estos en zonas comunes, cada propietario hará uso exclusivo del buzón que le corresponde. Por lo tanto, son considerados como elementos comunes de carácter privativo, lo que implica que la responsabilidad del mantenimiento dependerá de la situación.
La clave para determinar a quién corresponde esta responsabilidad reside en tres aspectos:
- Si la reparación o instalación abarca a toda una agrupación de buzones, el gasto y el mantenimiento recae en la comunidad de propietarios.
- Si el mantenimiento o reparación debe realizarse con motivo de un acto vandálico ajeno al propietario del buzón, la comunidad puede dar parte al seguro del edificio para que se encargue de la reparación. Además, se requerirá que el administrador también dé parte a la policía con la correspondiente denuncia, para dar fe de este hecho.
- Si el daño en el buzón es de carácter individual y se produce por un mal uso del propietario o por simple desgaste, este debe responsabilizarse de los gastos de mantenimiento o reparación. Ejemplos de ello pueden ser la rotura de la cerradura, la aparición de arañazos, abolladuras en su superficie, etc.
¡Así que es fundamental hacer un mantenimiento continuado para que nuestro buzón de correo no solo funcione a la perfección, sino que también se vea bien!
Consejos generales para el mantenimiento de los buzones de correo
Por suerte, mantener un buzón de correo ARREGUI es muy sencillo. Tanto solo hay que tener en cuenta estas recomendaciones:
- A la hora de instalarlos, es importante que la comunidad de vecinos o el propietario de la vivienda unifamiliar elijan una zona que esté lo más protegida posible de la luz directa del sol y de las inclemencias del tiempo.
- También es básico elegir el material adecuado en función del entorno, especialmente de su climatología. Por ejemplo, en zonas costeras o de alta humedad, es recomendable adquirir unos buzones fabricados enteramente en aluminio, porque ofrecen alta resistencia a la corrosión. Mientras que si el entorno es seco, el acero lacado o inoxidable también ofrecerá grandes resultados y durabilidad, independientemente de si se coloca en interior o exterior. Y si su ubicación está bien resguardada, quizá el plástico (como el poliestireno de alta resistencia) resulte una opción cómoda y económica.
- La cerradura es un elemento muy importante, porque confiere seguridad al buzón. Además, al ser el buzón un producto de uso diario, puede acabar siendo el componente que sufra más desgaste. Por eso, te recomendamos que hagas un mantenimiento específico para la tuya con los consejos que te damos en este artículo.
- Por supuesto, hemos de tratar de ser cuidados en el uso diario de nuestro buzón. Hay que utilizarlos de la forma indicada, evitando forzarlos y golpearlos.
- Limpiar de forma periódica tanto el interior del buzón como su superficie. Esto evitará que se acumule el polvo y la suciedad que puedan acabar dañando sus componentes, y hará que se vea tan bonito como siempre.
Recomendaciones para la limpieza de los buzones de correo
Te contamos cómo puedes dejar reluciente tu buzón de correo ARREGUI en función del material en el que está construido.
Acero inoxidable o lacado
Procede a limpiar regularmente tu buzón con un paño seco y un limpiador que no contenga disolventes. De hecho, para ponerte fácil la elección, en ARREGUI te ofrecemos dos tipos de limpiadores diferentes según su material de construcción:
- Limpiador Lim1001 para buzones de acero inoxidable: pulveriza el spray directamente sobre la superficie a limpiar y frota con un paño. Ofrece un secado instantáneo, limpiando y abrillantando para dejar una fina capa que repele la suciedad y el polvo.
- Limpiador Lim1002 para buzones de acero lacado: presenta las mismas propiedades que el limpiador Lim1001, con la diferencia de que es de uso específico sobre material de acero lacado.
Aluminio
Como ya hemos venido comentando, el aluminio es un material muy resistente. Y además tiene la ventaja de ser también de fácil mantenimiento, aunque es necesario tener en cuenta algunas cosas para hacerlo de la mejor forma.
Para empezar, debemos descartar el uso de materiales que puedan resultar abrasivos como la lana de acero, porque pueden deteriorar su superficie. Y además, también hay que evitar los productos corrosivos. Por lo tanto, podemos utilizar una esponja, un paño suave o un cepillo de fibras suaves que nos ayuden a retirar la suciedad de su superficie.
Esta herramienta la podremos mojar convenientemente en una mezcla de agua y líquido jabonoso para hacer una limpieza superficial. Y si queremos que sea más concienzuda, podemos optar por otros líquidos limpiadores que también suelen dar buenos resultados sobre superficies de aluminio: como una mezcla a partes iguales de agua y vinagre, una rodaja de limón con algo de sal (o un paño húmedo frotado previamente con limón) o una mezcla de agua caliente y bicarbonato de sodio.
Por lo demás, es recomendable no dejar secar las manchas que se puedan producir sobre el aluminio, así como utilizar un abrillantador de metales si lo que se busca también es un acabado vistoso.
Plástico
El plástico es un material práctico y bastante resistente, pero necesita de un mantenimiento frecuente para eliminar la suciedad. Para ello, puedes usar un cepillo suave, un paño o una esponja, y humedecer cualquiera de estos objetos con:
- Una mezcla consistente (pastosa) de bicarbonato de sodio y de agua. Por cada tres partes de bicarbonato, añade una de agua.
- Una mezcla equilibrada de vinagre y agua. Puedes verterla en un recipiente de spray y pulverizarla sobre la superficie del buzón, para después extenderla bien.
- Alcohol isopropílico: Mediante un paño suave y limpio, extiéndelo por toda la superficie para que quede bien desinfectada.
- Amoníaco: en el caso de que el buzón tenga manchas bien adheridas o presente mal olor, opta por esta opción más contundente. El amoníaco tiene propiedades desengrasantes, pero recuerda utilizar guantes y un algodón para aplicarlo, no sin antes disolver esta sustancia en agua. Y al terminar, deja que el buzón ventile bien antes de volver a usarlo.
Renueva tu buzón de correo con ARREGUI
Esperamos que nuestros consejos para el mantenimiento y la limpieza de tu buzón de correo te hayan sido útiles. Y recuerda que si tú (como propietario de vivienda unifamiliar) o tu comunidad de vecinos estáis pensando en renovar vuestro(s) buzón(es) de correo, en ARREGUI os ofrecemos un amplio catálogo que seguro que se adapta a todas las necesidades.
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