Cómo vigilar los puntos débiles de tu hogar para protegerlo de los ladrones

En España se producen al día 232 robos con fuerza en hogares. Este es el dato que se desprende del Balance de Criminalidad que el Ministerio del Interior publicó el pasado mes de junio a partir de los registros obtenidos durante el primer trimestre de 2022. Y es que, en total, en el territorio nacional tuvieron lugar 20.932 delitos de este tipo durante los primeros 90 días del año; lo que a la vez supuso un incremento del 27 % respecto a las estadísticas de 2021 en el mismo período.

Por lo tanto, la criminalidad en este ámbito está al alza y la ciudadanía debe incrementar sus protocolos y medidas de seguridad para ponérselo complicado a los ladrones. Una tarea que requiere tanto de sentido común como de capacidad de anticipación, para conocer la forma de pensar de los delincuentes y estar preparados ante sus técnicas y comportamientos más habituales.

En ARREGUI trabajamos para aportarte seguridad en tu hogar, de forma que hoy en nuestro blog queremos hablarte de sus puntos débiles y ofrecerte una serie de consejos para que puedas reforzarlos convenientemente. ¡Acompáñanos para descubrirlos!

¿Cuáles son los principales puntos débiles de un hogar?

A la hora de analizar los puntos débiles para la seguridad en el ámbito doméstico, hay que tener en cuenta un primer aspecto: si hablamos de una casa unifamiliar o de un domicilio que se encuentra en un edificio residencial o comunidad de vecinos. Como es lógico, en el primer caso la responsabilidad de la seguridad recaerá únicamente en las personas que habiten en la casa; mientras que, en el segundo, este aspecto será compartido por todos los residentes y habrá un mayor número de puntos de seguridad que serán necesarios vigilar.

Hoy vamos a centrarnos exclusivamente en la seguridad del hogar familiar, pero más adelante también te hablaremos detenidamente sobre cómo cuidar de las comunidades de vecinos para evitar que se produzcan robos en estos espacios. De esta forma, podemos señalar que los puntos de más riesgo de una casa son aquellos que los ladrones suelen utilizar para acceder a su interior.

Según datos aportados por la International Association of Certified Home Inspectors (InterNACHI), las ubicaciones favoritas de los ladrones para entrar en un domicilio son las siguientes:

• Cuatro de cada cinco (81 %) eligen entrar por el primer piso.
• Uno de cada tres (34 %) optan por acceder a través de la entrada principal.
• El 23 % escogen una ventana del primer piso.
• El 22 % prefieren la puerta trasera.
• Uno de cada 10 (9 %) accede a través del garaje.
• El 4 % de los delincuentes lo hacen por el sótano, el mismo porcentaje que a través de una entrada abierta.
• El 2 % optan por entrar por un área de almacenaje, al igual que el 2 % que penetran desde cualquier lugar del segundo piso.

Por lo tanto, podemos concluir que los puntos de mayor debilidad son las dos puertas (principal y puerta trasera), porque juntas suponen el 56 % de los accesos; así como el primer piso, el cual representa la gran mayoría de los allanamientos (81 %). Mientras que el garaje y el sótano son zonas de mucho menor riesgo, pero que tampoco hay que descuidar.

Cómo vigilar los puntos débiles de tu hogar

Una vez que tenemos clara la teoría – cuáles son los puntos de la casa que debemos proteger de forma especial -, vamos a darte algunas recomendaciones para pasar a la práctica.  Y, para ello, nos centramos en los dos tipos principales de entradas que existen:

Puertas

Como acabamos de ver, no por ser la entrada más evidente los ladrones la rehúsan. Normalmente tratan de acceder cuando los habitantes de la casa no se encuentran en ese momento, por lo que pueden actuar con cierta comodidad y tranquilidad para tratar de burlar la seguridad de la puerta. Así que es aconsejable cuidar estos aspectos para reforzarla:

• Material de la puerta: A la hora de elegir la puerta ideal para exterior, no solo hemos de preocuparnos de que sea bonita y cálida. También hemos de procurar que sea hermética, resistente, sólida y duradera. Y, para asegurarnos que así sea, es recomendable que optemos por una puerta acorazada frente a la blindada. Esta última presenta una estructura de madera con refuerzos de acero, por lo que no es del todo segura; mientras que la primera está fabricada en acero y la madera es un complemento de tipo estético.
• Cerradura: Es aconsejable que cambiemos la cerradura al menos una vez cada diez años. Y también podemos usar un doble sistema, ya que la combinación de una cerradura tradicional con la cerradura invisible con control por móvil KAMO es una magnífica opción para multiplicar la seguridad de nuestras puertas principales.
• Sistema de alarma: Instalar un sistema de alarma es un buen elemento disuasorio para evitar que los ladrones intenten entrar en un domicilio. Y, en el caso de que consigan superar burlar la(s) cerradura(s) o romper la puerta; se encargará de avisar de lo que está sucediendo: con una señal acústica, con un aviso o notificación (si esta es inteligente) o incluso enviando una petición de intervención a las fuerzas de seguridad (si esta está conectada a un servicio de vigilancia de 24 horas).

Ventanas

Las viviendas unifamiliares y las que están situadas en pisos bajos o en primeros pisos tienen mayor riesgo de sufrir un allanamiento a través de una ventana. Con lo cual, esto es lo que podemos hacer para protegerlas debidamente:

• Cerrarlas adecuadamente cada vez que vayamos a salir o si no vamos a estar en esa zona de la casa durante un largo período de tiempo.
• Instalación de barrotes: Son habituales en las plantas bajas, porque son la mejor forma de dificultar las entradas indeseadas. Sin embargo, si no deseamos que nos estropeen las vistas en momentos dados, podemos instalar barrotes abatibles, que podamos retirar nosotros desde el interior.
• Cristales seguros y de calidad: Otra buena opción es montar cristales blindados que garanticen resistencia y dureza ante golpes o intentos de rotura. O, si no queremos cambiar los que ya tenemos instalados, podemos añadirles láminas de seguridad que permitan reforzarlos.
• Utilizar persianas: Bajar la persiana antes de irnos de casa le pondrá más difíciles las cosas a los ladrones. De hecho, algunas incluso incorporan su propio sistema de seguridad con cierre de llave.
• Sistema de alarma: Al igual que en el caso de las puertas, hay alarmas que se pueden instalar en las ventanas para avisar en caso de intentos de manipulación. Aquí puedes ver nuestras soluciones para incrementar la seguridad de las tuyas.

Y… ojo con el patio o jardín

Para acceder al interior de las dependencias de tu casa, los ladrones usarán una puerta o ventana. Pero no olvidemos que, en el caso de los hogares que tienen patio o jardín, antes deberán entrar por ellos para llegar hasta el fondo. No proteger estos espacios al aire libre es casi una invitación a que intenten robar, así que también hemos de fijarnos en ellos y esforzarnos para garantizar su seguridad.

Nos referimos a instalar vallas o muros altos y que no sean fáciles de escalar o superar, contar también con puertas de acceso a ellos que sean seguras, disponer de una iluminación adecuada y, a ser posible, implantar un sistema de videovigilancia que controle permanentemente estos puntos débiles para que, en caso de percibir algún movimiento sospechoso, den la alarma inmediata y eviten que los delincuentes lleguen más lejos.

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